L a leyenda de las tres Pascualas.
Las Tres Pascualas eran unas hermanas muy hermosas cuyo oficio de lavandera las hacía concurrir diariamente, mañana y tarde, a lavar ropa a la orilla de una laguna. Un día llegó hasta la casa de las tres muchachas un forastero que solicitó hospedaje, siendo acogido gustosamente por el padre de las jóvenes.
Todos los días, al caer la tarde, el hombre regresaba hasta la casa y miraba a las Pascualas que volvían cantando, con sus lindas trenzas rubias y su atado de ropa sobre la cabeza. El joven se enamoró de las tres hermanas, y cada una, secretamente, correspondió su amor. Pero no sabiendo a cuál elegir como su esposa, les dio cita a las tres en la orilla de la laguna. A las doce de la noche el forastero remaba, pero al ver reflejarse en las aguas a las tres Pascualas, empezó a llamar: "Pascuala, Pascuala, Pascuala". Al escuchar su nombre, las hermanas se creyeron elegidas y comenzaron a adentrarse en las traicioneras aguas, muriendo ahogadas.
Desde entonces, en las encantadas noches de San Juan, a las doce de la noche se ve un bote y surge una voz que llama desesperadamente a las mozas.